Ética de la solidaridad, Jòsef Tíschner

La solidaridad de las conciencias.
"¿Qué significa ser solidarios? Significa compartir la carga de los demás. Ningún hombre es una isla. Estamos unidos, incluso cuando no somos conscientes de esta unidad. Cuando nace la solidaridad se despierta la conciencia, y aparecen entonces el lenguaje y la palabra (...) La solidaridad habla, llama, grita, afronta el sacrificio. Entonces la carga del prójimo se hace a menudo más grande que la nuestra."

Comunidad.
"El fundamento de la solidaridad es la conciencia, y lo que estimula su nacimiento es el grito del hombre maltratado por otro hombre. La solidaridad establece vínculos singulares entre los hombres: el hombre se une a otro hombre para auxiliar a quien necesita ayuda. Yo estoy contigo, tu estás conmigo, estamos juntos por él. ¿Que está antes? ¿El nosotros o el por él? Una comunidad de solidaridad se diferencia de las otras por el hecho de que en ella está antes el por él y después el nosotros. Ante todo está el herido y su grito. Después se atiende a la conciencia que es capaz de escuchar y entender ese grito. Sólo en este momento nace la comunidad."

Diálogo.
"El diálogo auténtico provoca una verdadera revolución en la vida de los hombres y de las sociedades. El diálogo descubre la verdad. Restituye a las cosas y a los problemas su verdadero aspecto. 
La primera condición del diálogo es la capacidad «identificarse» con el punto de vista del otro."

"Pasar por el mundo de sufrimientos del trabajador y dar testimonios; esto es lo que es la solidaridad de las conciencias. Dar testimonio significa ante todo llamar a las cosas por su nombre, emplear un lenguaje coherente con las cosas. Dar testimonio significa también suscitar la censura de la gente ante el dolor innecesario del trabajador (...) Surge la esperanza de que las cosas se puedan cambiar. Los hombres del diálogo de la solidaridad deben cuidar esta esperanza como se cuida a los ojos de la cara."

 Trabajo.
"La medida del trabajo es la vida humana a cuyo servicio está. El trabajo que no es portador de vida sino de destrucción, de enfermedad y de muerte, es un trabajo dañino, o mejor, ni siquiera es un trabajo.(...) El trabajo explotado en vez de crear divide y, dividiendo, se convierte en amenaza de muerte. La mentira del trabajo es la explotación."

Sufrimiento.
"El dolor del explotado es sobre todo un sufrimiento moral. La explotación hace daño como lo hace la mentira o la traición.
Un hombre explotado se siente traicionado. (...) Lo peor no es el hambre, ni la fatiga, ni el agotamiento físico. Lo peor es esa oleada de perversa traición que irrumpe en cada jornada laboral, en cada hora de trabajo.
La rebelión contra la explotación es un deber fundamental de la conciencia."

Arte.
"El arte descubre el sentido más profundo de la existencia y confiere un nuevo valor a la vida. La poesía es ese arte que «convierte en ángeles a los comedores de pan»."
"La obra de arte no nos permite olvidar. El monumento hace duraderos aquel acontecimiento, lo garantiza contra el olvidoy contra la labor destructora del tiempo.
La obra de arte nos coge de la mano y nos conduce hacia aquello que está en la raíz, hacia la verdad esencial.
El monumento relata la tragedia pasada para que esta tragedia no se repita nunca más."


Comentarios

  1. Interesante, muy interesante. No dejaré pasar este libro si se pone en mi camino.
    Besotes!!!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario