Septiembre variadito

 "Hace un instante era junio. Y ahora hace tiempo de septiembre. La mies está alta, lista para la siega, brillante, dorada."

Así empecé septiembre, leyendo Otoño de Ali Smith, ese cuarteto estacional que nos ha escrito y que voy a intentar leer este año con cada nueva estación. 

Continué con El lunes nos querrán de Najat el Hachmi. 

"Toda mi historia estaba en el barrio, pero el público quería algo más exótico, no quería saber nada de una pobreza tan cercana, les fascinaba más la que venía del desierto."

Después me dejé fascinar por Tributo a Blenholt, de Daniel Fuchs. Ese vecindario con tanto ruido, tantas voces y esas personas que van tejiendo sus vidas entre ellas, persiguiendo sueños y sobreviviendo a su día a día. 

"En las carcajadas mundanas de su mujer reconoció las vociferantes exigencias del mundo (...)"

De Nueva York me fui a Asturias de la mano de Aitana Castaño y su libro Carboneras. Conocí historias de mujeres luchadoras en las minas, historias que no deberíamos olvidar, aunque ahora ya no hay minas. 

Acabé un libro que tenía de hace tiempo, La monarquía del mido de Martha Nussbaum. Pero este no os lo recomiendo mucho. Se me hizo algo pesado. Sólo alguna frase que he anotado. 

"¿Cuál es el antídoto contra las cascadas informativas perniciosas? La relación correcta de los hechos, el debate público informado y, sobre todo, un espíritu de disconformidad e independencia entre la ciudadanía."

Con Joan Didion supe de sus duelos, primero el de su esposo, en El año del pensamiento mágico,  y después del de su hija con sus Noches azules. 

"En teoría todos esos recuerdos sirven para evocar momentos pasados. 

Pero la verdad es que solo sirven para dejar claro lo poco que aprecié aquellos momentos cuando los tuve delante. 

Y lo poco que aprecié los momentos cuando los tuve delante es otra cosa que ya no me puedo permitir ver."

Y he acabado el mes metida en Grand Hotel Europa, de Ilja Leonard Pfeijffer. Las novelas de gente que se va a vivir a hoteles me encantan y eso que yo no lo haría ni loca. Quizá sea de esas cosas que le gustan a uno porque las ve lejanas. Esta novela me ha recordado un poco a una película que vimos hace poco en casa, El gran Hotel Budapest. 

No os voy a decir que no me haya gustado, porque tiene 600 páginas y me lo he leído en una semana. Pero tampoco ha sido mi gran lectura del mes. Quizá haya bastantes escenas que me han sobrado. Quizá sus personajes me hayan caído mal. Pero me han gustado las reflexiones que hace en torno al turismo y ese flotador al que se suben tantos lugares para intentar salir a flote. Tampoco sé si ahora después de la pandemia este tema seguirá igual. No sé si Venecia volverá a ser invadida. Tampoco sé cómo ha vivido Venecia esta temporada sin turismo. 

Esta vez no os dejo las fotos de los libros, porque en esta ocasión han sido todos de la biblioteca y ya no los tengo en casa. Benditas bibliotecas. Lo que sí os dejo es esta foto preciosa, desconozco su autor, la ví en las redes. Es mi ciudad, Valladolid, que en septiembre durante sus fiestas hay días que podemos ver los cielos plagados de globos. Me encantan.


Comentarios

  1. Buenos días, Esther:
    ¡Qué foto tan chula, y qué estupendas lecturas! Me hace mucha ilusión que hayas leído Tributo a Blenholt, porque aumenta nuestra complicidad literaria.

    Un abrazo y felices lecturas para octubre!!

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    1. Hola Undine, la verdad es que siempre me estas descubriendo buenas lecturas. Para la de octubre no os acompañaré porque creo que en la biblioteca no la tienen. Un abrazo

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  2. Es la segunda mención que veo estos días a Tributo a Blenholt, de Daniel Fuchs. Me ha llamado la atención aunque preferiría empezar por el primero de la trilogía Verano en Williamsburg. He leído a Najat El Hachmi y a Joan Didion y ambas me han gustado mucho.
    Veo que ha sido un buen mes y variado, como dices.
    Un beso.

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    1. Sí, Rosa es que sigo un reto entre Undine y las Inquilinas. Yo cuando lo he leído no sabía que había trilogía y lo he disfrutado igualmente. Un abrazo

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  3. Hola.
    Pues ha sido un mes variado. Yo estuve a punto de hacer una reseña de Carboneras pero pensé que no interesaría a nadie al ser algo tan regional, así que imagínate mi alegría al ver que lo has leído.
    Muy feliz día.

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  4. Me llama mucho la atención el cuarteto estacional de Ali Smith. De hecho, había pensado que sería buena idea hacerlo como has comenzado a hacerlo tú. También, como asturiana, le tengo echado el ojo a Carboneras.
    Has tenido un mes de septiembre de lo más aprovechado, Esther.
    Besos

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  5. Hola Esther. Veo que aprovechaste bien el mes de Septiembre. De todos los que mencionas al que más ganas tengo, o más bien a la autora, es a Otoño. Quiero leer a Ali Smith, pero esto como siempre, a ver si se da la ocasión porque teniendo tantos pendientes... El del hotel también me llama, es una temática que como a ti también me atrae (más por curiosidad que por hacerlo yo, como dices, tampoco lo haría jaja); aunque no te haya resultado una lectura magnífica ya solo por habértelo bebido por algo será (también me gustó la película Gran Hotel Budapest). En fin, espero que se esté dando bien Octubre y que estés leyendo cositas interesantes. Yo ando con relatos de temática Halloweenesca (sobre todo relatos clásicos a los que tenía bastantes ganas de hincarle el diente) y también estoy con Charlotte Brontë y su Shirley, entre otras lecturas que se están sumando ahora a final de mes. Un mes repletito... jeje Un abrazo.

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